(Reseña de “Tú y yo, invencibles”, Alice Kellen)
Siempre he sido una amante de las historias románticas, de las líneas que te sacan un suspiro y te impulsan a desear vivir una experiencia similar a la que describen. Alice Kellen es una maestra para hacer eso, la conocí con la trilogía de “Volver a ti” y se convirtió inmediatamente en una de mis autoras favoritas. Con cada una de sus novelas se ha ganado un lugar especial en un rincón de mi corazón.
Sin embargo, “Tú y yo, invencibles” es un libro diferente, no es una historia de amor, es un relato imperfecto y eso es lo que más me gusta. Porque la vida no es color de rosa, tiene una gama amplia de arcoíris y los errores forman parte inherente de ser humanos.
Los protagonistas son Lucas y Juliette, no son una pareja ideal, son todo lo contrario, muy distintos, con defectos y fantasmas que los conducen a destruirse. Pero el amor los golpeó, así como dijo Julio Cortázar: “como un rayo que te parte los huesos y te deja estaqueado en la mitad del patio”. Porque a veces los sentimientos son así, no puedes elegirlos, llegan como un chubasco con la persona menos indicada en el momento menos esperado y son tan intensos que no puedes resistirte a ellos. ¿Quién no se ha quemado con ese choque eléctrico del roce de unos labios que te deja un terrible insomnio? ¿Quién no se ha preguntado el porque no puede sacarse a alguien de la cabeza?
El enamoramiento es visceral, contradictorio e inverosímil. Una emoción que vale la pena sentir por lo menos una vez en la vida. Por más que duela no te arrepientes de nada, incluso si es un amor radiactivo como el de Lucas y Juliette.
Este es un libro que nos muestra que aferrarnos demasiado a una persona no es bueno y mucho menos hacer hasta lo imposible por mantenerla a nuestro lado. Nos enseña que podemos cometer errores, pero a veces, estos nos pueden conducir a un precipicio y seguramente terminaremos lastimados. Nos recuerda, que dejar ir es parte del ciclo de la vida, que hay amores que son temporales, llegan para compartir solo un momento efímero, no para quedarse.
La ambientación está descrita de manera sublime, te transportas a los años ochenta en España, puedes escuchar la música de los Imperdibles Azules y mirar las pasarelas de moda de Juliette. Cada capítulo lleva el nombre de una canción y no hay nada mejor que arropar las letras con melodías de fondo.
Esta novela no es para todos, si eres de los que prefieres sumergirte en un mundo de fantasía perfecto para olvidarte de la realidad te diré que no es la historia que buscas. Pero si eres de los que disfruta empatizar con los personajes y de los que no les preocupa dejar que las lágrimas llenen sus ojos al leer, definitivamente deberías darle una oportunidad.
Sus páginas son una montaña rusa de emociones y una tormenta de malas decisiones con consecuencias desastrosas. Pero al final de cuentas todos somos así ¿no?, creaturas vulnerables que se equivocan, que lloran y sufren, almas inocentes que luchan por ser invencibles, a pesar de saber que hay amores radiactivos que son capaces de destruir e incluso de hasta matar.
A pesar de todo lo anterior, amo este libro, no puedo dar más detalles sobre la historia porque definitivamente debes leerlo para entender como es que un libro tan triste puede llegar a dejar huella y convertirse en uno de tus favoritos.